Anoche; hablando con mi hermano por teléfono y siendo conscientes de que su cuerpo está últimamente con algunas dolencias, llegamos a la conclusión de que su cuerpo, parte física, estaba protestando por algo.
- Escúchalo, le dije; tiene algo que contarte.
-Escúchalo como si fueras tú mismo. Como si fuera parte de tí.... despues de unas carcajadas, predecibles casi siempre que estoy con él, llegamos a la coclusión que muchas, muchísmimas veces, damos por hecho que nuestro cuerpo, es sólo una maleta en la que llevamos el equipaje....
Pero la pura ralidad es que somos un Ser intergral. Un todo. Cuerpo, Alma y Espíritu. Lo que afecta en una de las partes, afecta a las demás.
Nuestros pensamientos, activan nuestro sistema nervioso, que a su vez hace que generemos neuropéptidos que a su vez, nos facilitan emociones que activan, tensan o relajan nuestros músculos, generando dolores o relajación y bienestar
En mi fascinante visita al parque de las ciencias, me quedé observando un cerebro y su prolongación por la médula espinal, que a su vez, baja por la columna, inervando sus ramificaciones nerviosas en nuestros músculos...
Cada día ya son más los médicos y científicos, que nos hacen un llamado a "conectar", establecer una conexión entre lo que está pasando por fuera como reflejo de lo que está sucediendo dentro.
Cuantos dolores de cabeza, espalda, estómago, mejoran sólo con mejorar nuestro estilo de ver la vida. Tomarnos las cosas con más calma, sin perfeccionesmos, derrotas internas...
Una persona con un proyecto, una esperanza, una ilusión, generará más endorfinas....su sistema inmunológico se hará un poco más fuerte...Respiraremos mejor, sonreiremos más,... y a su vez, retroalimentamos más inmunoglobulinas....Sí, parece que nos encontramos ante una nueva ciencia emergente; La Psiconeuroinmunología
Es algo así como:
Mejora tu pensamiento, mejora tu vida!!!
Ya lo sabíamos. Desde muy antiguo, desde Hipócrates, Maimónides... lo sabemos, lo sabían nuestros ancestros, pero lo fuímos llevando al desván.... Es tiempo de quitarle el polvo a esa necesaria enseñanza, y ponerla en nuestra habitación favorita. Donde podamos verla, adornarla, hacer un collage, algo que nos la haga recuperar.
Yo por mi parte, os invito a ponerle un poquito de arte, dedicación y cariño...
Besos